.

.

martes, 6 de julio de 2010

RECONOCIMIENTO ADUANERO

.
Un matrimonio viaja a Europa de vacaciones. En la aduana de Alemania la esposa, que domina muy bien el idioma, mientras hace todos los trámites conversa en alemán con la empleada de migración:
.
-Buenos días, señora ¿sus papeles?
-Aquí los tiene.
El esposo, al no entender nada, pregunta: -Mi amor, ¿qué dijo?
.
-Me pidió los papeles -contesta la esposa tranquila-
.
Vuelve a preguntar la empleada; -¿Cual es el motivo de su visita?
-Venimos de vacaciones -contesta la esposa-
El esposo nervioso vuelve a preguntar a la esposa: -Mi amor, ¿que dijo?
-Me preguntó que a qué venimos a Alemania.
.
Continúa la empleada alemana: -¿De dónde vienen, señora?
-De Buenos Aires, Argentina.
Nuevamente insiste el marido muy nervioso: Mi amor, ¿qué dijo?
La esposa, un poco desesperada ya, le contesta: -¡Pregunta de dónde venimos!
.
La empleada comenta entonces: -¡Oh, Buenos Airessss! Una vez estuve allí hace algunos años.
Qué ciudad tan hermosa, la gente increíble, pero tuve la mala suerte de toparme con un hombre que era insoportable, ni me acuerdo de su cara, vago, sucio, machista, celoso, preguntón, desconfiado, no me dejaba en paz y además tuve el peor sexo de mi vida!.
.
-¿Qué dijo?
¡¡¡-Que te conoce, boludo!!!

.
.
.
=============================================================